
Ver los trenes, que van y que vienen. A la gente, la que sube cuando la puerta esta casi cerrada y reírse, una vez mas, de los que no llegan a subirse y maldicen por lo bajo.
Mirar al cielo un rato, darse cuenta de que es mas grande de lo que parece, ver como se cae la tarde que ha visto subir desde la mañana.
Y yo que lo veo y vuelvo a maldecir a la urbanidad y a las buenas costumbres, que no le permiten a uno preguntarle a un perfecto desconocido, cuantas personas pierden el tren por día.-
5 comentarios:
siempre hablando con desconocidos vos
jajaj
muy bueno el relato
es verdad q a veces la indiferencia y el individualismo q tenemos la gran mayoria (en la cual me incluyo) no nos dejan ver a aquellas centenares de personas q tenemos a nuestro alrededor todos los dias. y mucho menos dialogar con ellas.
saluda atentamente
giuly
visite por favor http://enfutbolyalgomas.blogspot.com
muchas gracias
cartu me gusto mucho...
a veces el preocuparse en uno mismo o en donde va a sentarse o de que manija se va a agarrar.. no nos deja ver al de al lado ..
q se yo. esta groso!
LOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOÓÓÓÓÓÓÓÓÓÓÓÓÓÓÓÓÓÓÓÓÓÓÓÓÓÓÓ
una pequeña mosquita se para a descansar en tu mesa, pobre y extenuada. agotada toma bocaandas de aire apra recobrar el aliento. y vos que haces? La amtas. ASESINA!
desde la redaccion de yonodialogomas, gracias por los comentarios, sigan en ese camino, he dicho.-
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